Cada experiencia en nuestras vidas deja su huella. Moldea nuestro carácter y nos escultura en la persona perfecta que se supone que debemos ser. Después de varios años, he sido capaz de convertir mis limitaciones en ventajas.
Uno de los principales cambios que estar paralizados tuvo en mí fue que me he vuelto emocionalmente mucho más sensible e intenso. Y como una forma de defensa propia, también me volví muy insensible. Lo que significa que algo puede estar ocurriendo a mí alrededor y yo me quedo allí sentado, mirando como si no hubiera nada. Pero cuando ese algo me toca al corazón, de inmediatamente las nubes revientan. Y mi corazón se derrama en lágrimas.
Es el verano de 1995, 6 meses después del derrame cerebral. Después de varios meses de rehabilitación en Helsinki, me llego el momento para hacer frente a la vida lo que solía ser mi vida normal. Es momento de regresar esos lugares que están llenos de buenos recuerdos maravillosos y a enfrentar a los familiares y otras personas queridas.
Es un hermoso día de verano y es hora de volver a casa. Me siento entumecido mientras el taxi va rumbo a casa. No tenía ni idea de cómo mi vida, mi futuro iba a ser. Fue la primera vez en mi vida que no tenía planes o sueños para el futuro. Ninguno, en lo absoluto.
Estos últimos seis meses en el hospital y en el centro de rehabilitación pueden haber ayudado un poco con mi situación médica, pero no ha hecho nada por mi alma y mi situación espiritual. Es aquí de nuevo en casa donde el saneamiento puede comenzar.
Yo no sabía que para sanar el alma y el espíritu uno primero tendría que arrancarse al corazón, para luego de nuevo ponerlo junto con mucha paciencia y dedicación. Esto tomará mucho tiempo, años hará falta la ayuda de familiares y amigos. No por su compasión y palabras tiernas. Sino por sus forma de mirar. El cura venía de sus ojos. Algunos ojos llenos de compasión, otros llenos de tristeza. Dolía, dolía! mucho. Lloré mucho. No me di cuenta en ese entonces que fue el comienzo del proceso de sanación.
Muchas de las bendiciones que tengo son en forma de buenos amigos. Había los que estaban allí todo el tiempo. A otros les tomo tiempo para hacer frente a la situación y obtener la fuerza necesaria para venir a ver me de nuevo. Por supuesto hubo algunos que se desvanecieron. No los juzgo, es una situación difícil de manejar y no todo el mundo sabe cómo lidiar con él. Caray, yo todavía me encuentro con gente que no sabe cómo manejarse a mi alrededor.
Después del suceso, empecé a apreciar a la gente de una manera diferente. Sobre todo a mis familiares y amigos, sin ellos no hubiera sido nada hoy. Yo no lo habría logrado sin ellos. No solo los de uno que están a mí alrededor, sino también aquellos que están a miles de kilómetros de distancia. Que no podían estar aquí conmigo en persona, eso no les impidió estar conmigo en espíritu diariamente.
Amigos desempeñaron un papel muy importante en la historia de mi vida. En cierto modo su vida y poder compartirla con ellos me hizo sentir que yo todavía tenía una vida que vivir. Sus presencias fueron de gran ayuda. Incluso en los momentos en que nos sentábamos en silencio. Estos silencios cómodos eran inconmensurables.
A pesar de toda la suerte que tenía y la bendecida que me sentía por tener esta hermosa familia y grandes amigos, aún había una parte de mí que se sentía muy sola. No importa cuál feliz me sentía por ellos cuando estaban haciendo sus vidas, teniendo novios y esposos, formando su propia familia y tener hijos. Yo veía todo eso y no podía evitar de pensar que: «Yo estoy paralizado, pegado a una silla, en la necesidad de asistente para cada cosa. Nunca voy a tener eso, siempre voy a estar solo, y nunca voy a tener a alguien conmigo para hacer que todo sea más soportable”. Nadie lo sabía lo que pasaba por mi mente, nadie sabio del enorme agujero negro de la soledad que tenía escondida detrás de una sonrisa terca que se negó a dejar de entregarse.
Al igual que todo sucede con un motivo, y toda acción produce una reacción. Mi lado rebelde digestivo esos sentimientos de soledad para crecer más fuerte, y con eso se puso más fuerte mi fe y mi esperanza, y me propuse ser siempre positivo y nunca darme por vencido. Y mientras todo esto sucedía empecé a vivir, y vivir más plenamente. La vida siguió su camino y me encontré con mis propia formas de disfrutar la. Y entonces de la nada… “Sorpresa, sorpresa!” (Eso vendrá en otro blog)
A veces las cosas más comunes pueden ser las extraordinarias cuando se hace con la gente adecuada. Como estar siempre en casa después del ataque, en una forma todavía estaba bien, y no me sentía tan mal porque tenía la gente correcta a mí alrededor. Tuve la suerte de tener a esta gente, y quiero aprovechar esta oportunidad para agradecer a todos ellos desde el corazón: «Hola, queridos, saben quiénes son, les quiero agradecer a todos ustedes desde el fondo de mi corazón por todo lo que han hecho por mí. Debo confesar sinceramente que no sé si yo hubiera tenido la misma paciencia para sentarme con un amigo paralítico al igual que todos ustedes han tenido conmigo. Queridos, quizás no saben esto, pero ustedes mantuvieron mis raíces firmemente a través de la peor tormenta y me mantuvieron derecho, cuando no podía hacerlo yo mismo. «Los quiero muchísimo”
Kati
Thank you for charing, really clear what it takes to adapt to the new you and why some people are having such difficulties with that and others- with the right circumstances- can cope. And you are still developing your spiritual strengths. You do not mention if or in what way God played a role in this process… may be some other time.
You ever read one of the books of Joni Eareckson? An American lady who got paralized after a diving accident. I bet she must have a website by now.
Kati,
I was in tears as I read this one. You give me great insight to your life of silence in a chair but full of hope now and a great spirit! Wow, I feel your pain and wish I could give you back some of your ability to move your body
but you give me the ability to move my spirit with this great insight. You are so strong 🙂
Hei Kati! Olen lukenut kirjasi Silmänräpäys ja ihmettelen kuinka olet selvinnyt eteenpäin noin kovan koettelemuksen kanssa. Itse menen paniikkiin jo pelkästä ajtuksesta sairastua noin vakavasti kuin sinun osallesi tuli.Elämä on todella epäreilua, olemme menettäneet kaksi lasta vakavien sairauksien murtamina.Toivon että voisit jotain kertoa kuinka olet selvinnyt järissäsi. Toivon Sinulle ja perheellesi kaikkea hyvää, ja voimia elämässä.Kohteliaimmin Reetta Hämäläinen