Ya de niña de 2,5 años no quería ni dejaba que nadie me ayudara con nada. Quería aprender y entender todo por mí mismo, no importaba el tiempo que tomaba. Mamá siempre se acuerda de un cierto día, cuando yo estaba luchando con un par de medias gruesas, tratando de ponérmela, ella quería ayudarme, pero hace falta decir que no aceptaba su ayuda y apuesto a que fue una vista muy divertida.

Cuando tenía 6 años de edad, estaba en el centro de la ciudad con papá y en la ventana de una tienda vi un par de botines de color bebé azul que tenían borlas con diferentes bolas de colores que iban a su alrededor. Oh Dios mío, fue amor a primera vista! Yo no podía esperar a llegar a casa para contarle a mamá sobre ese increíble hallazgo. Cuando le contaba sobre eso ella me escuchaba con una cara muy seria y luego me dijo: ” Si realmente quieres esos botines, porque no vas a banco con papá, retiras dinero de tu cuenta y vas comprarlos” Eso hice. Con el dinero que había ahorrado cada vez que había limpiado para abuela compre lo botines. Estaba tan extremadamente feliz cuando me compré esas botas  Me dio una sensación de autoestima poder comprar cosas sin tener que pedir dinero.

Creo que tenía unos 13 años cuando yo ya estaba manteniendo una vez a la semana un club para niñas. Yo también fui en mi primer viaje al extranjero a Italia con mi tía a la edad de 13 años. Durante ese viaje, aprendí a ser más independiente, a confiar en mí mismo y no depender de nadie. Incluso mi hobby “el baile” me ayudó a ser más independiente. Especialmente el ballet que no es deporte de equipo. Usted no puede confiar en nadie para cubrir sus errores o deficiencias.

Empecé a trabajar a la edad de 15 años, en todo el tiempo de verano y durante el periodo escolar a tiempo parcial, en el fin de semana y algunos días después de la escuela. Todo porque odiaba pedir dinero. Yo quería ser capaz de hacer todo por mí mismo.

El modelaje definitivamente me enseñó a ser más independiente. Países extraños, culturas extrañas, lenguas extrañas y no había mamá! Cómo cocinar, lavar la ropa y leer mapas. La vida cotidiana de un modelo no es tan grande y glamoroso como lo que la gente piensa. Los días se llenan de castings lo que usted tiene que encontrar por si misma, todo a pie, en transporte público o en coche. De cualquier manera usted está siempre solo, así sin la confianza y la independencia simplemente no dura mucho tiempo.

Es ahora que soy mayor me doy cuenta de que aun siendo siempre tan independiente, en una forma siempre dependía de la estructura de la familia y la sociedad para poder ser yo mismo en ese entonces.

Después del incidente era como tener que empezar todo de nuevo. Era como un bebé y no era independiente en lo absoluto. Imaginase, la única cosa básica que podía, puedo hacer por mi propia cuenta es respirar. Dependo de asistentes para todo lo demás. Para beber, de comer, para  todas las necesidades del ser humano.

Todavía me acuerdo de lo independiente que me sentí entonces cuando después de una película volví a casa sola en el taxi (por primera vez después del accidente cerebrovascular) Mi dios me sentí tan independiente otra vez. Muy divertido cuando se piensa en ello.

En junio de 2006 me trasladé a solas con mi asistente al otro lado del mundo, al Caribe. Ahora eso es algo que puedo llamar realmente independiente, algo que el viejo Kati habría hecho. Ese tiempo en Aruba fue una gran escuela independencia! Todo para después de repente regresar a Finlandia, de vuelta a casa de mis padres, sin ninguna privacidad o independencia alguna. Realmente me sentí como que no pertenezco. Me sentí como un huésped de visita.

Era la primavera de 2010 cuando iba de viaje al EE.UU. decidí hacer una parada en los Países Bajos para satisfacer mi curiosidad y conocer a Henning en persona. Gracias a Dios que lo hice! Con él me sentí muy independiente de nuevo y todavía me siento así, en nuestra propia casa, Happy (nuestro perro), Henning y Yo. Manejando el hogar, cocinando y la jardinería (todo por dar órdenes por supuesto).

Se puede decir que hoy en día dependo totalmente de otras personas. Sin embargo, esto no es del todo cierto. Puedo decidir por mí mismo cómo vivir mi vida, cómo disfrutar de ella y cómo compartirla.

Kati

Qué es la independencia y la libertad realmente, sino más que un acto de equilibrio, al igual como todo lo demás en la vida. No se puede tener las sin darlas a los demás. No se puede tener el derecho a ser independientes y tener la libertad de elección sin ser responsable y respetar el derecho de todas las personas y darles también la independencia y la libertad de elección.

Si tenemos en cuenta que Kati está paralizado de cuello abajo se podría pensar que ella está totalmente dependida de mí. Pero eso no es cierto. Porque a pesar de Kati se depende de muchas maneras diferentes en mí, así que puede ser ella misma. Yo también dependo de ella que sella como es, para así yo pueda ser mi mismo yo.

Me siento verdaderamente bendecido a compartir esta vida mía con ella.

Henning